Los siguientes dos informes son el resultado de estudios de estudiantes hondureños sobre el tema internacionalmente discutido «Democracia con deficiencias»:
Informe de la democracia en Honduras y sus deficiencias
Introducción
En el siguiente trabajo se les hablara acerca de la democracia de Honduras y sus deficiencias, de cómo ha evolucionado en los últimos años y las consecuencias que se han dado en nuestro país. La democracia en Honduras ha sido un factor tanto positivo, como negativo, la cual la mayoría de los hondureños opinan que la democracia no se cumple en su totalidad. Sin embargo, algunas personas consideran que la democracia en Honduras se proporciona de manera justa y honesta. La democracia en Honduras inicia desde su etapa como estado de Honduras, continua durante su etapa como Republica de Honduras, hasta la actualidad, en varias ocasiones ha sido interrumpida por golpes de estado y dictaduras.
CAPITULO 1
Objetivo General
- Conocer los aspectos más relevantes de la democracia de Honduras y su deficiencia.
- Profundizar sobre lo que significa y representa la democracia en Honduras.
Objetivos Específicos
- Identificar las deficiencias de la democracia en Honduras.
- Explicar las deficiencias y las consecuencias de la democracia en Honduras.
- Reconocer el papel que ha desempeñado la democracia a través de la historia en Honduras.
JUSTIFICACION
Este trabajo trata, en primer lugar, de poner orden en la discusión relativa a los principales argumentos que desde diferentes concepciones vienen manejando en defensa del sistema político democrático. Se trata de que quede claramente identificada la naturaleza de los argumentos en conflicto, así como de ofrecer una reconstrucción en la que estos argumentos encuentren un encaje coherente. En segundo lugar, el trabajo sostiene que una adecuada comprensión del conjunto de cuestiones implicadas en la justificación de la autoridad democrática exige una reflexión sobre la pretensión normativa que acompaña a toda autoridad, sea ésta democrática o no. Esto lleva a abordar el problema de la justificación de la pretensión normativa de la autoridad desde una perspectiva que no afecte exclusivamente a la filosofía política, sino en la que están implicadas cuestiones que interesan muy centralmente a la filosofía del Derecho. Se dedican algunas páginas a exponer uno de los argumentos de mayor peso que se han de enfrentarse contra la justificación de la pretensión normativa de la autoridad: la paradoja de la autoridad, planteada por R. P. Wolff. Esta paradoja se confronta, finalmente, con dos teorías de la autoridad expresamente concebidas para superarla: la concepción de la autoridad como servicio de Joseph Raz y la tesis del valor epistemológico de la democracia de Carlos S. Nino, poniendo a prueba la solvencia de ambas teorías.
CAPITULO 2
Pregunta
¿Hemos tenido alguna vez democracia después de la independencia de 1821?
Lo primero que se impone es una respuesta aparentemente radical: La verdad es que nunca ha existido en toda la historia del país algún momento que respire aire de democracia. Por el contrario, han prevalecido los regímenes autoritarios, patriarcales, militaristas, represivos, genocidas y otros gobiernos que han utilizado el ropaje de la democracia para enriquecerse a base de la corrupción y la generación de miseria de nuestros pueblos.
La democracia de Honduras se debilita cada vez más, es importante reconocer que ninguna democracia es igual, ni en fondo ni en forma. No somos un país en el que podemos elegir nuestras autoridades de manera justa e integra. Nuestros superiores y encargados de este proceso se aprovechan de aquellas personas que no tienen la capacidad ni los recursos para defender sus opiniones libremente, sin temor de que vayan a ver repercusiones debido a lo expresado.
CAPITULO 3
¿Qué es la democracia?
Según la Real Academia Española Democracia es:
- Forma de gobierno en el que el poder político es ejercido por los ciudadanos.
- Participación de todos los miembros de un grupo o de una asociación en la toma de decisiones.
Historia
La democracia es un proceso político que se origina en el siglo V a.C. en la Antigua Grecia y pasa a ser la forma de gobierno predominante en la era moderna, en Honduras la democracia existe desde su independencia de España en 1821 donde se establece que todos los hombres son libres sin importar su raza, se elimina y prohíbe la esclavitud y todos los ciudadanos con mayoría de edad son elegibles para votar, desde entonces la democracia ha sido la forma de gobierno con algunas interrupciones y continua siéndolo la forma de gobierno en la actualidad.
La historia de Honduras nos demuestra que si bien se han tenido iniciativas tenues de querer instaurar la democracia, vagamente esta ha logrado imponerse. Nuestra historia es marcada por periodos autocráticos, donde hemos pasado por transiciones militares que luego se transformaron en un gobierno “democrático.” Nuestra sociedad, nuestro ciudadano promedio desconoce sus derechos más básicos, no cuestiona su sistema de constitución de ley y más allá de esto, no exige apropiadamente.
Algunos antecedentes
Concluido el conflicto político-militar en Centro América de los años 70 y 80, Honduras ingresó a una nueva fase signada por la implementación a fondo del modelo neoliberal. De tal manera, que Honduras en los años 90´s y dos mil atravesó por tres transiciones:
La primera. De una economía tradicional dominada por la producción para la exportación del banano y el café, a una economía más diversificada. El énfasis de la transformación descansó en rubros agrícolas no tradicionales siempre para la exportación (aceite de palma, melones, cítricos, legumbres y hortalizas y otros) y en la producción industrial de la maquila, cuyo rubro más significativo fueron los hilados y tejidos.
La maquila se constituyó en la principal fuente de trabajo asalariado en el país, al generar más de 120,000 puestos de trabajo, mayoritariamente femenino. El sector de telecomunicaciones y el sector financiero, ambos bajo el control de capital transnacional, acompañaron esta transformación mediante el posicionamiento de novedosos productos como los teléfonos celulares y las tarjetas de crédito. El énfasis en la actividad exportadora significó en muchos casos el cierre de pequeñas y medianas empresas ante la expansión de las unidades mayores y de los abastecimientos importados. La reconversión inducida por el ajuste, destruyó mucho de la base industrial que había sido creada.
La segunda. De una sociedad signada por poderosas organizaciones campesinas y vigorosas organizaciones sindicales que incidían en la agenda nacional, a una sociedad socialmente más fragmentada y con mayores niveles de precarización del mundo del trabajo. Estos cambios se tradujeron en bajos niveles de sindicalización, proliferación de acuerdos individuales de trabajo en lugar de los contratos colectivos, reducción de las históricas conquistas laborales y otros. A esta precarización del mundo laboral también contribuyó el papel relevante de la economía informal en la generación de empleo (más del 58% de la Población Económicamente Activa se ubica en este sector). Asimismo, Honduras se transformó en una sociedad más urbanizada (50,5%), con mayores niveles de escolaridad pero paradójicamente con menores oportunidades de empleo.
Toda esta dinámica de cambio estuvo dominada por grandes contrastes territoriales-sociales entre regiones y municipios. La organización social de los sectores sociales subalternos se fragmentó, pero se extendió a nivel nacional, ya no en torno a centros fabriles y asentamientos campesinos, sino a comunidades y territorios.
La tercera. De una sociedad altamente militarizada a una democracia electoral hegemonizada por los dos centenarios partidos políticos tradicionales. El peso de ese bipartidismo consolidó una elite política y económica opuesta a construir un Estado de derecho y socialmente responsable, en otras palabras, un Estado con independencia partidaria de los poderes del Estado, con pesos y contrapesos, con mecanismos de transparencia y control ciudadano, con descentralización democrática y mayor participación ciudadana directa, con formulación y ejecución de políticas públicas para la inclusión social y la reducción de la pobreza. En su lugar, se establecieron “reglas del juego” que siempre beneficiaron a los pequeños pero poderosos grupos económicos-políticos, convirtiéndose el Estado en el principal instrumento para promover sus intereses.
CAPITULO 4
El inicio de la democracia en Honduras
Desde su etapa como estado de Honduras, miembro de la República Federal de Centro América, continua durante su etapa como República de Honduras, hasta la actualidad, en varias ocasiones la democracia del país ha sido interrumpida por golpes de estado y dictaduras para luego restablecerse el orden constitucional…
Elecciones en Honduras
Las elecciones en Honduras cuentan con elecciones primarias donde los partidos políticos del país escogen a sus candidatos presidenciales, se realizan durante el tercer año de gobierno del gobierno actual; y con elecciones generales de Honduras, durante el cuarto año del gobierno de turno, unos meses antes de finalizar su mandato y un año después de haber realizado las elecciones primarias donde se eligen los candidatos presidenciales de cada partido político. En ellas se renovaron los titulares de los cargos de elección popular de la República de Honduras.
La primera elección democrática se dio durante la asamblea constitucional de 1821, en esa misma se elimina la esclavitud y puede votar cualquier ciudadano masculino sin importar su raza.
Sufragio Femenino
En 1955 se legista el derecho al voto fémina de las ciudadanas mayores de 18 años, desde entonces cualquier ciudadano sin importar su raza o género es capacitado a votar.
Golpes de Estado
Si bien Honduras ha sido un país con gobiernos democráticos desde su fundación, ha contado con varios presidentes, muchos de ellos han sido derrocados por golpes de estado, donde posteriormente se ha restablecido el orden constitucional. Hasta la fecha solo catorce presidentes de Honduras han logrado completar su periodo presidencial.
El primer golpe de estado fue ejercido en 1827 contra el primer gobernador de Honduras, Dionisio de Herrera y el más reciente golpe de estado fue el Golpe de Estado en Honduras de 2009.
Las deficiencias de la democracia en Honduras
- Violencia
- Corrupción
- Autoritarismo
- Desigualdad
- El caciquismo tradicional hondureño
La aplicación de la democracia en Honduras
La aplicación de la democracia en Honduras no es más que el resultado de lo que con poco interés y voluntad política hemos decidido implementar. Hemos diseñado un aparato de gobierno donde aparentamos tener la estructura democrática, pero la práctica se ha tergiversado. La democracia de Honduras en una democracia viciada de clientelismo político, entidades poco transparentes y un nulo sentimiento de pertenencia. La democracia de Honduras es una democracia donde lo importante reside en que mientras los indicadores económicos se mejoren, no hay porque cuestionar el rol del gobierno en la sociedad. La democracia de Honduras es corto de vista y parece que estamos en un momento donde tememos enfrentar la realidad de nuestro fragmentado sistema y al mismo tiempo deseamos que nuestras condiciones de vida mejoren.
La falta de voluntad, el caciquismo tradicional hondureño, y el autoritarismo han minado la consolidación del proceso democrático hondureño. Los altos niveles de violencia, la creciente presencia de los grupos del crimen organizado en buena parte del territorio nacional, la escasa capacidad de respuesta del Estado frente a los problemas del país y la apuesta por utilizar a las fuerzas armadas en funciones que deberían ser desarrolladas por otras instituciones, son circunstancias preocupantes que dificultan llevar a buen paso un proceso democrático medianamente satisfactorio. En Honduras ha faltado hacer política, entendida como la búsqueda pacífica de la regulación de los conflictos, mediante el establecimiento de reglas comunes, compartidas y aceptadas por la mayoría, con el objetivo de garantizar una convivencia aceptable.
La democracia cuenta con una serie de valores
La democracia de un Estado debe estar acompañada de una serie de valores, y estos valores deben ser un reflejo de su sociedad, sin exclusión alguna de cualquier clase social.
Idealmente hablando estos valores incluyen la libertad, igualdad, civilidad, justicia, participación, pluralismo, tolerancia, legitimidad, respeto y solidaridad. Todos y cada uno importante para el sano desarrollo de una sociedad democrática. Ahora, si hacemos reversa en la comprensión sobre los valores inherentes que debe tener la democracia, es importante reconocer que estos valores deben ser ejercitados por sus ciudadanos.
El desarrollo y práctica de los valores anteriormente mencionados son una consecuencia de lo que inicialmente aprendemos en nuestra familia y posteriormente reforzamos en la escuela y así sucesivamente. Cabe mencionar que el proceso de adaptación de estos valores a nuestro diario vivir es un proceso simultaneo, mientras lo enseñamos, también debemos practicarlo. De lo contrario sucede lo siguiente: el niño desconoce los valores en la familia y este pasa a la escuela volviéndose una tarea más difícil, de la cual no todos habrán adaptado los valores apropiados y por último el encargado de reformar es el Estado y lo hace, en el caso de Honduras, con las más altas condiciones de hacinamiento, violencia, corrupción y mala vida para el reo.
El rol de la educación en la democracia
La educación juega uno de los roles más importantes en la formación, desarrollo e implementación de la democracia de un Estado. Sin embargo tenemos la idea errónea que la educación es el trabajo que le compete a la escuela, colegio, centro técnico, universidad y sobre todo al Estado. A los hondureños nos fascina culpar al Estado por un sistema de educación fragmentado. Somos víctimas de un sistema educativo atrasado sin aras de esperanza para nuestra juventud. El Estado tiene su parte de reprimenda, que tarde o temprano deberá responder porque tal como lo dice nuestro actual presidente, “la voz del pueblo es la voz de Dios.” Pero la responsabilidad más grande yace en nosotros. Nosotros los contados que logramos educarnos bien y mejor. Hoy en día la educación tiene la facilidad de venir de todo tipo de canal formal e informal. A través del arte educamos, a través de la danza educamos, a través del deporte educamos, a través de las redes sociales educamos y a través del ejemplo educamos.
CAPITULO 5
Nuestra Democracia
La democracia ha sido confundida con el hecho de tener elecciones presidenciales y con la delegación de gobiernos con la participación de un pueblo analfabeta, pobre, manipulado por campañas multimillonarias que se pagan con el dolor y sufrimiento de los pobres.
Si partimos de la idea de que democracia es el «dominio del pueblo sobre sí mismo» lo primero que consideramos es quién es el pueblo y quién domina en una sociedad como la nuestra. Por la ciencia social se conoce que quienes tienen el poder son determinados grupos sociales que controlan la economía, la educación, la cultura y la ideología y como país históricamente hemos estado sometidos al colonialismo y neocolonialismo que han creado condiciones para instaurar regímenes que no han respondido a un espíritu verdaderamente democrático.
En Honduras se considera que existe una democracia donde el pueblo no gobierna ni delibera sino que lo hace a través de sus representantes indirectos, tal es el caso de los diputados en el Congreso de la Republica.
Algunos sociólogos y politólogos hondureños afirman que Honduras vive bajo un proceso de democratización y participación social en las decisiones importantes para la vida nacional. Analicemos con la óptica de la realidad si esta afirmación es correcta.
En base a nuestra Constitución y las leyes Honduras es un estado de derecho que se rige por el régimen de la democracia. Sin embargo en un sentido material y real no existe ni igualdad ni equidad en Honduras; la mayoría de las familias no satisface las necesidades básicas de alimentación, vivienda, transporte, salud y educación. La democracia por lo tanto no puede existir en una sociedad donde se tortura, se violan los derechos humanos y se excluye a la mayor parte de la población.
El fortalecimiento de la democracia pasa por la comprensión de las Fuerzas Armadas como una administración pública más, subordinada a los intereses nacionales que determina el pueblo a través de sus representantes electos; pero esa circunstancia no es suficiente para lograr el objetivo final.
Es necesario fortalecer el aparato del Estado y generar dinámicas positivas de transformación. En un contexto tan complicado como el que enfrenta Honduras se requieren de acuerdos. Sin embargo no es fácil de lograr, sino que está muy alejado de la dinámica política local que lleva hacia situaciones de conflicto, y dificulta el diálogo constructivo.
¿Existen oportunidades para que participen en la democracia los que tienen los estómagos vacíos, los descalzos(as), desnudos, analfabetas, desnutridos y enfermos por causa de un sistema desigual e injusto?
Tanto en los gobiernos anteriores como en el presente ha existido y se continúa practicando la represión de los movimientos populares; para lo cual se utiliza el ejército y la policía que no sólo promueven el miedo y el terror en las poblaciones sino que han estado involucrados en genocidio y asesinato de jóvenes y dirigentes sociales.
La libertad de expresión se restringe a las personas y organizaciones que no son partidarias de las políticas económicas desiguales y que defienden los derechos humanos y la justicia ambiental. Por todo lo anterior es evidente que Honduras no tiene una verdadera democracia ni participación social.
¿Cómo podemos mejorar este mal social?
Podremos colaborar a establecer los espacios democráticos que hay que construir, legalizar y ampliar mediante la educación de las bases sociales que se equipen de concepciones organizativas, de unidad para lograr las conquistas sociales en este mundo injusto. Los espacios podrán ser beneficiados mediante la organización de un movimiento amplio, unido no solo para lograr el mayor número de diputadas y diputados sino para la transformación basada en la justicia social y económica.
Sí necesitamos en Honduras que los movimientos sociales reanalicen el concepto de democracia; que estudien sus prácticas y que entiendan el desorden ideológico en que se encuentra. Así se podrá recaudar esfuerzos para lograr un país libre de racismo, de violación de los derechos humanos, de destrucción ambiental y de dependencia cultural. Así se podrá anhelar a convertirse en constructor de una nueva sociedad, justa, digna y soberana.
CAPITULO 6
Soluciones para mejorar la Democracia
Últimamente, es difícil abrir las páginas de un periódico sin encontrar propuestas dirigidas a regenerar la democracia. No dudo que nuestra democracia esté aquejada de algunos males.
Primer postulado: distinguir lo que es democracia de lo que no lo es. Aunque este enunciado parece muy irreal, lo que propone tiene un carácter muy práctico. No se trata, pues, de entrar a resolver si la democracia es más que un procedimiento electoral o de debatir sobre las ventajas e inconvenientes de la democracia directa. Creo que estos temas son importantes, pero es más importante distinguir las deficiencias que afectan a nuestra democracia de los problemas que inciden en otros elementos de nuestro sistema constitucional, como son la división de poderes o el Estado de Derecho.
El excesivo uso del decreto-ley en esta legislatura está propiciado, sin duda, por la mayoría absoluta del partido en el Gobierno. Pero esta invasión del ejecutivo sobre el legislativo también habría sido posible con un Gobierno de coalición, por lo que no es un problema de resultados electorales. Deriva, más bien, de los retrasos del Tribunal Constitucional a la hora de dictar sentencia y de su generosa interpretación de la “extraordinaria y urgente necesidad” que el art. 86.1 la Constitución presupone para que el Gobierno haga uso de un poder cuyo titular natural es el Parlamento.
Plantear los casos de corrupción como problemas de la democracia también me parece un error que puede tener consecuencias severas. Cualquier cargo público puede caer en la tentación de conductas intolerables, como cobrar comisiones o apropiarse de fondos. Pero sólo podrá hacerlo si el Estado de Derecho no funciona, esto es, si las normas dejan oportunidad para esas prácticas, si el control previo de la intervención no es operativo y si los órganos de fiscalización externa, como el Tribunal de Cuentas, carecen de medios para perseguir estas conductas. Para enfocar la corrupción, pues, no hay que modificar nuestra democracia, sino perfeccionar el ordenamiento y fortalecer el control jurídico para prevenir y sancionar los delitos. Y esto no es democracia, sino Estado de Derecho.
Segundo postulado: para regenerar la democracia, el mejor camino es confiar en ella. Algunas de las propuestas que se están mezclando, lejos de favorecer la democracia, parecen destinadas a ponerla todavía más en duda. Quizá muchas de ellas estén hechas de buena fe, pero las buenas intenciones no bastan, sobre todo cuando dichas medidas provienen de personas con gran capacidad de influencia, sean del Gobierno o de la oposición.
Algo se dirá después de la reforma del sistema electoral. Ahora conviene resaltar que no es bueno para la democracia culpabilizar de los males que afectan a las únicas instituciones elegidas por todos los ciudadanos y en la que están presentes no sólo la mayoría sino también la minoría, esto es, los parlamentos. Debemos de ser sinceros, las críticas a las retribuciones y privilegios de los parlamentarios o a su lento funcionamiento no siempre son desinteresadas. Cuanto menos prestigio tenga el parlamento, menos control de la oposición y más poder para la mayoría y para el Gobierno que se sustenta en ella. Más que cambiar los sistemas de designación, la solución está en que los partidos tengan altura de miras y, al designar cargos para las instituciones, piensen más en el interés general que en los próximos resultados electorales.
Tercer postulado: para mejorar la democracia, lo más efectivo es reformar los partidos políticos y acrecentar la responsabilidad (política y social) de los cargos públicos. No estamos en la mejor democracia posible, eso está claro y, desde luego, creo que sería preciso mejorar la elección de representantes o incorporar nuevas instituciones de democracia participativa. Pero no creo que estas deficiencias hayan causado la crisis en la que nos encontramos.
Los partidos políticos siguen siendo los nervios del sistema democrático, pero están perdiendo capacidad para llevar la opinión de los ciudadanos a la vida del Estado. En un sistema democrático, los gobernantes no sólo responden ante el parlamento, sino también ante la opinión pública, porque son los ciudadanos quienes votan y mantienen con sus impuestos a todos los poderes públicos. Nuestra democracia es representativa, pero eso no significa que quienes desempeñan cargos públicos puedan utilizar mal el poder que se les ha asignado.
CAPITULO 7
Índices En Democracia De Honduras
Malas noticias para el país. El reciente informe sobre índice de la Democracia de la Unidad de Inteligencia del grupo Británico The Economist; ubicó a Honduras como un país con muy bajos índices en democracia.
Honduras forma parte del régimen híbrido. Lo que significa una carencia en cuanto a los cinco criterios de análisis principales. El estudio está basado en el año 2016 y lo ubica con una puntuación de 4.5 de 10; siendo el 1 el nivel más bajo de democracia.
Incluso, de acuerdo a una gráfica, el año más bajo para Honduras fue el del 2010. El cual estuvo basado en el año 2009, el centro de una crisis política tras el Golpe de Estado. Por otra parte, cabe destacar que los años con mayor democracia fueron durante la presidencia de Manuel Zelaya Rosales; tomando en cuenta desde el período de elecciones hasta que fue destituido.
El año 2005 presentó un 6.25; año 2006 un 6.25; el año 2007 un 6.18 y tras la crisis del 2009, Honduras cayó a un 5.76. Pasó de tener una democracia defectuosa a un régimen híbrido.
CONCLUSIONES
- Hemos comenzado este trabajo advirtiendo de la enorme complejidad que tiene el problema de la fundamentación de la autoridad democrática. A lo largo del mismo hemos tratado de poner de realce un sin número de cuestiones que deben ser adecuadamente tratadas a la hora ofrecer una concepción satisfactoria de la autoridad política. Se trataría, en primer término, de diferenciar nítidamente entre distintas pretensiones de legitimidad que toda autoridad política parece reclamar para sí: la pretensión de exclusividad, la pretensión de corrección y la pretensión normativa. Como hemos visto, la pretensión de exclusividad significa que quien ordena asumiendo una posición de autoridad sostiene que existen razones para que sea él (o ella) quien emita mandatos dentro del ámbito de competencia que reclama para sí, sin que esta función le pueda ser disputada por ninguna otra autoridad potencial. Por su parte, la pretensión de corrección supone que quien pretende autoridad sostiene que aquello que ordena es valioso o está justificado. Los principales argumentos que desde la filosofía política se han esgrimido en defensa del sistema político democrático el del valor (sustantivo) del proceso democrático y el de la calidad de las decisiones democráticas pueden concebirse como la correlativa respuesta a cada una de estas pretensiones.
- En conclusión, nunca podrá haber democracia sin igualdad de género, donde exista la tortura, la violación de los derechos humanos y la desigualdad social que se refleja en la inmensa pobreza. Por todo lo anterior es evidente que Honduras no tiene una verdadera democracia ni participación social; a pesar de la existencia de algunas instituciones como el Ministerio Público, la aparente civilidad de la policía que ahora se está transformando en una policía militarista y de una consigna del nuevo gobierno sobre el poder ciudadano y la ley de la participación ciudadana.
- Por tanto la democracia de Honduras es la democracia que por ahora el hondureño quiere que sea. La propia definición de la democracia nos los dice sencilla y explícitamente, la democracia reside en el poder del pueblo, por tanto es tarea de ese pueblo asumir con responsabilidad la labor de gobernar.
Marco Referencial
- Publicado en agosto 19, 2016 por Claudette Cubero https://catrachoglobal.com/politica/la-democracia-de-honduras/
- https://es.wikipedia.org/wiki/Democracia_en_Honduras
- Publicado el 15 mayo 2006 por Juan Almendares https://elinvestigador.blogspot.com/2006/05/democracia-en-honduras.html
- Publicado el 22 septiembre, 2017 https://elpulso.hn/democracia-y-gobernabilidad-en-honduras/
- Publicado por Paloma Biglino Campos el 10 de Octubre, 2014 https://elpais.com/elpais/2014/10/10/opinion/1412953685_419073.html
- Publicado Por Belkis Argueta marzo 9, 2017 https://tiempo.hn/honduras-bajos-indices-en-democracia/
- https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1870576616000039
- Publicado por Juan Almendares mayo, 2006.
http://elinvestigador.blogspot.com/2006/05/democracia-en-honduras.html
SEGUNDO INFORME sobre la Democracia y sus deficiencias
INTRODUCCIÓN
Los países en el mundo pueden ser catalogados con democracias plenas, débiles, hibridas o con regímenes autoritarios. Todo país debería de contar con democracia plena ya que es la que brinda mayor estabilidad económica, política y social entre sus habitantes. Sin embargo, no todos los gobernantes piensan de la misma manera y es por eso que algunos de ellos, abusan del poder y cada país se cataloga en cualquiera de las democracias existentes.
El siguiente informe tiene como propósito dar a conocer lo que es una democracia plena y una democracia imperfecta mediante sus conceptos, diferencias, ejemplos de países y datos relevantes que son publicados cada año.
CONTENIDO Democracia plena
Significado de democracia
La democracia, palabra que proviene del vocablo griego “demos” o “pueblo”, se define básicamente como un gobierno en el que el poder supremo le corresponde al pueblo. En algunas de sus formas, la democracia puede ser ejercida directamente por el propio pueblo, pero en las sociedades grandes, el pueblo la ejerce por medio de agentes elegidos por él mismo.
La democracia suministra un medio para la protección y el ejercicio efectivo de los derechos humanos. Esos valores se han incorporado en la Declaración Universal de Derechos Humanos y han sido elaborados aún más en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos que consagra una multitud de derechos políticos y libertades civiles en los que se basan las democracias significativas. La democracia ha surgido como tema fundamental en los resultados de las principales conferencias y cumbres de las Naciones Unidas desde el decenio de 1990, y entre las metas de desarrollo por consenso internacional que produjeron (Naciones Unidas, 2020).
Características de la democracia
- Forma de gobierno en la que todos los ciudadanos adultos ejercen el poder y la responsabilidad cívica.
- Proteger ciertos derechos humanos básicos, como la libertad de expresión y de religión.
- Se realizan con regularidad elecciones libres y equitativas.
- Las sociedades democráticas se comprometen a respetar los valores de la tolerancia, la colaboración y el compromiso. Los parámetros a considerar de cómo identificar si un país es democrático o no,
son: proceso electoral, pluralismo, libertades civiles, funcionamiento del gobierno, participación política y cultura política. Muchos países en el mundo cumplen con estos parámetros, pero es importante identificar la realidad que se vive en los países. No solo decir que se catalogan democráticos por decirlo, se debe identificar si se cumplen en su totalidad los parámetros antes mencionados.
Datos importantes en la democracia Según el informe publicado por “The Economist 2019”. Existen 22 países en
democracia plena (5,7% de la población mundial), 54 países en democracias débiles (42,7% de la población mundial), 37 países en democracias híbridas (16% de la población mundial) y 54 países restantes en un régimen autoritario (35,6% de la población mundial).
Los factores que influyeron para la reducción de calificaciones en gran parte de las naciones analizadas son: baja participación de la población en elecciones, debilidad en la funcionalidad del gobierno, disminución en la confianza de instituciones, crecimiento de
la influencia de entidades no elegidas o irresponsables, ampliación de las brechas entre políticos y electorado, declive en las libertades de los medios y erosión de las libertades civiles, entre ellas el freno a la expresión
Países que cuentan con democracia plena
Dejemos un poco de esperanza en las llamadas “full democracies” las primeras del listado. Democracias completas que lideran 22 países de todo el mundo. Es importante ver como un país centroamericano (Costa Rica), se posiciona en el número 19.
- Noruega
- Islandia
- Suecia
- Nueva Zelanda
- Finlandia
- Irlanda
- Dinamarca
- Canadá
- Australia
- Suiza
- Países Bajos
Tipos de democracia
- Democracia directa:
- Luxemburgo13.Alemania14.Reino Unido 15. Uruguay
- Austria 17. España 18. Isla Mauricio 19. Costa Rica 20. Francia 21. Chile 22. Portugal
Es el tipo de democracia más deseada y todavía anhelada en los países superpoblados ya que la democracia directa suele ser implementada en espacios de pocos habitantes, al ser este un sistema de participación directa, tal y como su nombre indica,
sin intermediarios ni representantes. Normalmente los debates y decisiones son instrumentalizadas mediante el sistema asambleario.
- Democracia liberal: Es común dentro del mundo Occidental, cuyo sistema está definido por la elección
de los gobernantes mediante votación (sufragio), aquellos representantes donde están sujetos a un Estado de Derecho, a unas leyes y Constitución que han emanado del pueblo igual. En este tipo de democracia los ciudadanos disfrutan de derechos y libertades, tanto individuales como a nivel colectivo, pluralismo democrático, tolerancia política, social y religiosa.
- Democracia democristiana: Fue muy extendida en algunos países europeos en el siglo XX, en países como
Alemania, Irlanda o Italia. Ella consiste en regir las leyes de la vida pública con los mandamientos y valores de la religión cristiana, incluyendo a católicos y protestantes. En este sentido, la ideología democristiana suele virar a la derecha, a legislaciones más conservadoras y hacia una liberalización de la economía.
- Democracia indirecta o representativa: Es la más implementada en la actualidad. Aquí los ciudadanos eligen a diferentes
perfiles políticos (presidentes, delegados, alcaldes, senadores, diputados) para que los representen en la vida pública y en las decisiones políticas. Esta es la utilizada en Honduras, nosotros cedemos el poder a nuestros gobernantes para tomar las decisiones.
- Democracia parcial: Hace referencia a los sistemas políticos donde los poderes del pueblo están bien
limitados en la esfera y actividades políticas (poder de decisión). Cumplen con los requisitos básicos de cualquier democracia como elecciones, libertad de expresión y
pluralidad de partidos, pero los conciudadanos no gozan de acceso real a las administraciones del Estado.
- Democracia popular: Se dice de los gobiernos populares aquellos que han roto sus lazos con el
imperialismo, colonialismo o han conseguido su independencia mediante la resistencia (armada en algunos casos) popular para con el invasor. Estos sistemas son de carácter socialista y progresista, y el partido del gobierno ostenta hegemonía, nacionaliza empresas y se opone a la Globalización. Fueron ideados por la antigua Unión Soviética, y se implementaron en los países de su influencia, denominados estados satélites.
Democracia imperfecta
Las democracias imperfectas son naciones donde las elecciones son justas y libres y se respetan las libertades civiles básicas, pero pueden tener problemas, como la infracción de la libertad de los medios. Además, suelen carecer de una cultura política desarrollada, tienen bajos niveles de participación en la política y problemas en el funcionamiento del gobierno.
Por ejemplo, en el año 2016, Estados Unidos fue degradado de una democracia completa a una democracia imperfecta su puntuación imperfecta, atribuida a los efectos de la crisis financiera mundial.
En el siguiente cuadro, se muestran los países que cuentan con una democracia imperfecta.
Las características que clasifican a las democracias imperfectas son procesos electorales recurrentes, problemas de gobernabilidad, poca cultura política, poca participación electoral y uno muy importante es la corrupción, esta tiende a ser generalizada y el estado de derecho es débil.
La sociedad civil es débil y por lo general, hay hostigamiento y presión sobre los periodistas. El poder judicial no es independiente; es importante señalar los principales elementos de retroceso para la democracia y las serias irregularidades en los procesos electorales del país. Honduras también experimentó una disminución en su puntaje que pasó de 5.92 a 5.72, luego de que las elecciones presidenciales en noviembre revelaran serias irregularidades en el proceso de votación. The Economist, informó haber tenido acceso a grabaciones secretas entre los miembros del partido del presidente en ejercicio, Juan Orlando Hernández, discutiendo técnicas de fraude electoral para mantenerlo en el cargo; una ventaja inicial para su rival, Salvador Nasralla, se revirtió en los retornos
posteriores, lo que llevó a muchos a sospechar de fraude. A pesar de las objeciones de la oposición y un recuento parcial, el resultado fue certificado y el Sr. Hernández juró como presidente del país a principios de 2018 nuevamente. Sin embargo, el episodio socavó el puntaje del país en el proceso electoral y el pluralismo.
Pedro Barquero evidenció, que según análisis hechos por varios organismos entre ellos: el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM) y el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), en Honduras se podrían estar perdiendo alrededor de 50 mil millones de lempiras anuales por concepto de corrupción. Barquero es de la opinión que «esa cantidad de recursos servirían para mejoramiento del sistema de salud, educación, seguridad en el transporte público en los barrios y colonias; y todavía sobraría para bajar los impuestos a los hondureños sean empresarios o no». En torno al tema, el empresario señaló el impacto de la corrupción los cuales dijo son: una mezcla de dos factores principales, el primero, una política tributaria equivocada y el segundo, los altos niveles de corrupción. Subrayó que esos dos temas están conectados con una política tributaria equivocada, la cual ha sido para drenar cantidades de recursos de la economía, que, a su criterio, estos «deberían de estar en la bolsa de los hondureños», pero son llevados al Gobierno, en donde una gran parte del dinero se pierden en corrupción (Murillo, 2019).
América Latina y el Caribe registraron un segundo año de declive en el Índice de Democracia anual de el puntaje promedio de la región cayó ligeramente de 6,33 en 2016 a 6,26 en 2017. Aunque la región sigue siendo la más democrática en el mundo en desarrollo, su puntaje sufrió en medio de continuos problemas con la corrupción, que ayudaron a erosionar la confianza popular en la democracia y los líderes elegidos democráticamente. Los periodistas en América Latina enfrentan violencia, demandas y acoso a gran escala. El patrón de violencia extrema contra periodistas en varios países
latinoamericanos continuó sin disminuir en el año 2017. América Latina tiene un puntaje regional promedio de 6.8 en nuestro ranking de libertad de medios.
El puntaje promedio de América Latina es reflejando los problemas de la región con la corrupción y el crimen organizado transnacional. La tasa de asesinatos relacionados con el tráfico de drogas aumentó en toda la región y los bajos niveles de compromiso político. La región cae por debajo del promedio mundial en una sola categoría, la cultura política, debido al nivel relativamente bajo de confianza popular en la democracia de la región.
Honduras se sitúa junto a Brasil, Colombia y México se encuentran entre los lugares más peligrosos del mundo para periodistas, y puntualiza en que pocos de los crímenes cometidos contra periodistas son investigados o enjuiciados. En cuanto a niveles de libertad para la prensa, Honduras está en el sitio 49, empatado con Albania, Bangladesh, Bolivia, Brasil, Bulgaria, Burkina Faso, Guatemala, India, Nicaragua, Nigeria, Paraguay, Perú, Filipinas, Corea del Sur y Surinam. El Índice de Democracia considera que la libertad de expresión es esencial para que la democracia arraigue y florezca. La calidad de la democracia en cualquier país puede medirse en gran medida por el grado de qué libertad de expresión prevalece.
Por otro lado, Honduras lastimosamente se ubica como el tercer país del istmo con la mayor percepción de corrupción. El informe de Transparencia lo ubica en la actualidad en el puesto 132 de 180 países tomados en cuenta (La Prensa, 2019).
Conclusiones
En una democracia, las personas deben ser capaces de hacer que su gobierno responda de manera significativa. La libertad de expresión es lo que nos permite convertirnos en individuos autónomos que son capaz de comprometerse con ideas y
decidir en qué creemos. La libertad de expresión, el acceso a la información y la libertad de los medios de comunicación son necesarios para una buena gobernanza porque estas libertades les permiten a los votantes seguir, cuestionar, criticar y ejercer control sobre sus representantes elegidos y el gobierno.
Todos los países deberían de contar con democracia plena ya que en esta es donde la población obtiene mejores beneficios y mayor calidad de vida. Los gobernantes no abusan del poder y tienden a estar regulados. Es triste conocer la realidad de países como Honduras donde los altos índices de corrupción no disminuyen, por ende, ubican al país en una situación difícil y de sufrimiento para su población.
Bibliografía
La Prensa. (10 de diciembre de 2019). La Prensa. Obtenido de https://www.laprensa.hn/premium/1341179-410/corrupcion-honduras- centroamerica-informes-transparencia-internacional
Murillo, H. (23 de octubre de 2019). Radio América. Obtenido de http://www.radioamerica.hn/pedro-barquero-l-50-mil-millones-se-pierden- anualmente-corrupcion-honduras/
Naciones Unidas. (2020). Naciones Unidas . Obtenido de https://www.un.org/es/sections/issues-depth/democracy/index.html
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